El
bienestar siempre suele estar ligado a lo que se posea...ya que si no se
posee no se come y si no se come no se vive. Eso está claro y es el
juego al que todos jugamos. Todos nos frustramos si no cubrimos esa
necesidad de alcanzar el papel moneda que nos permite acercarnos a ese
bienestar umbral. Todos lo pasamos mal cuando no conseguimos encontrar
nuestro hueco si nos da lo mismo donde se encuentre dicho hueco.
Pero cuando tu curro además tiene tanto de vocacional, la frustración y
el agobio de la falta de él se complementa con una caída en picado de
la seguridad en uno mismo. Porque por mucha experiencia que tengas, la
tienes en un ámbito concreto en el que aunque tú estés dispuesto a hacer
"cualquier otra cosa", como todos, aunque dicha actividad no te
llene... de quien depende darte "cualquier otra cosa" parece rehacio a
hacerlo porque aquello que has desempeñado toda la vida... no es válido
como experiencia laboral, metiéndote en una espiral de...
-Si, has trabajado 14 años, pero eso no es "TRABAJO-TRABAJO"... es hacer teatro.
Piensas que qué guay si no hay nada en lo tuyo y para todo lo demás parece que no vas a servir.
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